
En un mundo que corre a mil por hora, en el cual la vida es tan incierta y las cosas pueden dar un giro cuando menos lo pensamos hacia estados negativos de vida, un seguro de vida puede ser visto como una latente necesidad.
Los seguros de vida son una gran herramienta financiera que ofrece inmensos beneficios a los asegurados y a todos sus beneficiarios. La muerte de un miembro de la familia es una experiencia traumática, especialmente si él o ella era el sostén de la familia.
En esos momentos, los miembros de la familia que se encuentran en duelo tienen que hacer frente no sólo una pérdida personal, sino una posible crisis financiera que ninguno esperaba sobre llevar. Aquí es donde un
seguro de vida entra en función, ofreciendo la certeza que necesita el resto de la familia para saber que puede vivir con tranquilidad.
Con el uso de los seguros de vida se garantiza que en la ausencia de la cabeza del hogar, sus seres queridos serán atendidos como se deben y tendrán la seguridad financiera que tanto necesitan en estos momentos difíciles.
Los seguros de vida son contratos legales entre dos partes, la compañía de seguros y los asegurados interesados en proteger sus intereses. Con un seguro de vida el beneficiario recibe apoyo financiero en caso de fallecimiento o de un accidente sufrido por el asegurado. En los términos de la póliza la compañía de seguros se compromete a pagar una prima específica a determinados intervalos regulares.
El seguro de vida también depende de una serie de factores, dentro de los cuales se incluye la edad, ingresos, gastos, préstamos pendientes de pago, número de dependientes, salud, etc...
Dentro de los beneficios de los seguros de vida se puede decir que estas herramientas proporcionan una cobertura monetaria a los miembros de la familia en caso de fallecimiento del asegurado. De esta manera, se representan como una excelente inversión y protección de activos. El seguro de vida proporciona diversas opciones de inversión que se adaptan a los propios cambios de las necesidades financieras en las diferentes edades.
De igual forma, son un excelente elementos para la planificación de la educación de los hijos, el matrimonio, el hogar, e incluso las opciones de jubilación se acomodan muy bien para la inversión en seguros de vida. Para una pareja joven con niños, un seguro de vida puede se la fuente para brindar a los pequeños una buena educación, así como también puede ser un elemento que ofrezca riqueza. Mientras que para una pareja de ancianos, el mismo seguro puede ofrecer planes de jubilación e hipoteca. Cualquiera que sea el dinero acumulado en vida puede llegar a ser una posible fuente de ingresos cuando llegue la jubilación.